Nosotros

MANIFIESTO VEGALFARO

Porque no todos los vinos son diferentes. Nosotros lo tenemos claro.

En un mundo que va demasiado rápido, nosotros preferimos detenernos.

Escuchar a la tierra. Oler el viento. Tocar el silencio de una tinaja.

Porque el vino no se hace con prisas. Se cultiva con paciencia.

Somos viticultores antes que bodegueros.

La tierra no nos pertenece. Nosotros pertenecemos a ella.

Por eso la cuidamos, la respetamos y la escuchamos.

No usamos pesticidas. No forzamos procesos.

Simplemente dejamos que la naturaleza haga su trabajo…

y nosotros acompañamos con humildad.

Somos una familia.

No una multinacional, ni un logo vacío.

Aquí hay apellidos, manos manchadas de mosto

y decisiones que se toman alrededor de una copa.

Cada botella que sale de Vegalfaro lleva dentro

el esfuerzo de un equipo que cree en lo que hace.

Somos vino con alma.

No buscamos impresionar. Buscamos emocionar.

Nuestros vinos no se gritan, se susurran.

Se descubren poco a poco, como los buenos libros.

Como las historias que se cuentan con el tiempo.

Elegimos lo difícil, lo auténtico, lo real.

Podríamos hacerlo más fácil. Pero entonces no seríamos nosotros.

Elegimos cultivar en altitud, vendimiar a mano, fermentar en tinaja,

hacer vino de pago… y dormir tranquilos sabiendo que no nos traicionamos.

Creemos en un futuro más limpio.

Donde el vino no solo hable de sabor,

sino también de valores, sostenibilidad y respeto.

Porque el verdadero lujo hoy… es consumir con conciencia.

Este no es solo nuestro vino.

Es nuestra voz. Nuestra forma de ver el mundo.

Es nuestra rebeldía elegante.

Nuestro legado.

Bodegas Vegalfaro

Desde Requena, para quienes eligen con el corazón.

Porque no todos los vinos son diferentes.

Nosotros lo tenemos claro.